Carlos III fallece y Carlos IV asciende al trono, inaugurando un periodo en el que el poder real se delega en ministros.
Carlos III fallece y Carlos IV asciende al trono, inaugurando un periodo en el que el poder real se delega en ministros.
Estalla la Revolución Francesa, un movimiento que transforma Europa al exigir libertad, igualdad y fraternidad.
España se une a la Primera Coalición contra la Francia revolucionaria, participando en campañas con resultados limitados.
El Tratado de Basilea (22 de julio de 1795) pone fin al conflicto con Francia, devolviendo la paz pero generando tensiones internas.
Se firma el Tratado de San Ildefonso, sellando la alianza con Francia y comprometiendo a España a apoyar a Napoleón contra Gran Bretaña.
La Armada española sufre una grave derrota en la Batalla del Cabo de San Vicente frente a la flota británica.
Guerra de las Naranjas: tropas españolas invaden Portugal y ocupan Olivenza, bajo presión de Napoleón.
El Tratado de Badajoz (6 de junio de 1801) consagra la cesión de Olivenza y la clausura de puertos portugueses a Inglaterra.
Batalla de Trafalgar: la flota combinada hispano-francesa es derrotada decisivamente por la marina británica, marcando el dominio británico en el mar.
Tratado de Fontainebleau permite el paso de tropas francesas por España con destino a Portugal, debilitando la soberanía nacional.
Motín de Aranjuez: el pueblo y soldados se rebelan contra Manuel Godoy y exigen la renuncia del rey.
Carlos IV abdica en favor de su hijo Fernando, marcando el fin de su reinado.
En Bayona, Napoleón obliga a Fernando VII a ceder la Corona a su hermano José Bonaparte, dando paso a la Guerra de la Independencia Española.